*Zitacuarense sufre discriminación y malos tratos en SAPA*
H. Zitácuaro Michoacán a 26 de Julio del 2021.
Por: Carlos Riveliño Dolores Mondragón
En una entrevista dada a Portal Urbano 24/7, el ciudadano Francisco Aguilar Carrillo, menciona y pone en evidencia los malos tratos que ha estado recibiendo por parte de compañeros y directivos del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado (SAPA) en la ciudad de Zitácuaro Michoacán.
Francisco Aguilar menciona que empezó a trabajar en la reparación y mantenimiento de los diferentes pozos de la ciudad después de recibir un balazo en su trabajo previo como oficial de policía, de lo cual derivó que padeciera parálisis parcial en la parte izquierda de su cuerpo.
14 años son los que ha trabajado, sin que se hayan reportado incidentes por su parte, y su condición no ha impedido que realice sus responsabilidades de manera eficaz, 14 años acudiendo a las reparaciones cada vez que se le solicite.
Ahora, el trabajo que Francisco desempeñaba de manera normal, ha estado lleno de problemas y de discriminación, esto a raíz de una transferencia de personal nuevo en el pozo #4, ubicado en la Manga de Clavo, Prolongación de Morelos Nte.
Este compañero nuevo, irónicamente, de nombre Francisco Javier, ha demostrado un total desprecio para con su tocayo, pues le ha hecho no solo burla por su jerarquía dentro del trabajo, sino también por su condición física (PARÁLISIS).
El señor carrillo y su esposa también mencionan, que desde que llegó este nuevo compañero, las herramientas propiedad de Francisco Aguilar, han estado desapareciendo del lugar de trabajo, desde simples tuercas, hasta herramientas eléctricas y manuales como lo son, taladros y machetes, de los cuales se tiene el reporte que este nuevo compañero, los ha estado sustrayendo.
Investigando un poco más, se han dado cuenta de que la transferencia del nuevo compañero es un “castigo” por parte de los directivos de SAPA, pues ya hay reportes previos que acusan a Francisco Javier de haber robado y meterse en líos, todo esto en el pozo #5.
Pareciera que el castigo es ahora para los trabajadores del pozo #4, más que para el infractor transferido.
Aguilar Carrillo dice que ya ha metido reportes acerca de este compañero transferido, cosa que ha hecho que se le discrimine aún más, al punto de impedirle la entrada a ciertas partes del espacio de trabajo, esconder y recoger su herramienta para evitar que se la roben, y hacerlo responsable de las herramientas perdidas y dañadas.
Ya harto de los malos tratos, Francisco Aguilar Carrillo, denuncia que, dentro de las instalaciones del pozo, hay varios trabajadores que aprovechan la nula respuesta de los supervisores, David Méndez y el Ing. Álvaro Peña, responsables directos de supervisar los pozos y la planta tratadora, para emborrachase y hacer fiestas en plenas horas de trabajo, y menciona que incluso hay una mata (por no decir árbol) de más de 1 metro de altura de marihuana plantada justamente dentro de las instalaciones del pozo #4 de SAPA.
Señala que los tratos hacia su persona y la pobre respuesta por parte del Supervisor David y el Ing. Peña, los cuales ni siquiera se dignan a responder sus llamadas telefónicas, han estado haciendo de su trabajo un verdadero calvario.
Pide que los altos directivos resuelvan esta situación tan lamentable, no solo hacia su persona, también para los demás trabajadores que laboran responsablemente a su lado, y que se haga justicia de manera adecuada, para que nadie más sufra discriminación.
Francisco Aguilar Carrillo menciona que no ha hablado ni denunciado estos hechos con anterioridad por miedo a perder su trabajo, del cual depende su familia y sus seres queridos.